Pasto

Con Voz al Sur en San Juan de Pasto, en un espacio de encuentro, creatividad, amables gentes y fino humor donde compartimos y vivimos por 15 dias con seres andinos que nos narran como habitan este escenario.

Pasto Coqueta!

Continuamos nuestra huida desde Cali por toda la panamericana hacia el sur, esta vez nos encontramos en el camino con el centro de una ciudad llena de luz que se caracteriza por sus estructuras coloniales, blancas y limpias, les estamos hablando de Popayán, entramos a la ciudad en vísperas de Semana Santa y la gente estaba preparando y pintando sus casas para recibir a los visitantes y feligreses que cada año se acercan a este epacio. Continuando el camino nos topamos con carreteras en muy mal estado, gasolina y peajes costosos, que fuerte, nos roban de frente y no pasa nada, afortunadamente durante este recorrido la naturaleza nos brindo un bello paisaje con largos y caudalosos ríos, con imponentes montañas y la diversidad de rostros y acentos que habitan el macizo colombiano.

Al comenzar la noche llegamos a nuestro destino. Pasto, una ciudad que en la sombra muestra las luces de las soberbias iglesias, el sonar de los poemas y el clic-clac de las copas que brindan en los bares donde se encierran las historias e ideas del andar bohemio de sus habitantes; rodeada de montañas y toda la energía que esto significa, allí, nos topamos con Rafa, Wilson, y la gente de la Red de Prensa Alternativa del Suroccidente Colombiano (RPASur) con quienes compartimos entre guayusa [1], música y hervidos [2] las noches andinas y una que otra buena bailadita y chumadita [3], aprovechamos para agradecerle a Rafa por la increíble acogida, el espacio, el excelente humor que continuamente lo caracteriza y por guardarnos el sartén.

Al norte, entre Pasto y Nariño con unas vías increíbles para montar bicicleta y sentir toda la montaña, se encuentra Genoy, que achichuy! [4], un pueblo campesino en la falda del volcán Galeras que se convirtió en hogar y por supuesto centro de operaciones durante nuestra estadía, allí abundan las comidas típicas del sur como el frito pastuso, un plato con carne de cerdo y yuca, el famoso Cuy, un roedor que se come acompañado de yuca y crispetas, y los helados de paila. En Genoy todos los días el volcán se siente, el agua está impregnada de azufre, los animales, la gente y el silencio hacen de este, el lugar perfecto para conectarse con la naturaleza y con seres llenos de luz como Itak, Juan, Botia y en especial Carolina, que con su sentir de la tierra y el cuerpo a través de la meditación hizo que este paso se convirtiera en una carga de energía para cada un@ de nosotr@s. Las Gracias a Jonathan y Migue, seres sensibles y pensantes que nos adoptaron y brindaron su espacio durante varios días compartiendo con nosotr@s momentos de alegría.

Para la realización de la serie audiovisual, trabajamos en Pasto con RpaSur, un combo que utiliza la radio como herramienta de enlace entre las comunidades y que pone al aire temas de interés y reflexión política, un combo diverso, trabajador y de buen humor con el que compartimos ideas, comidas, propuestas y risas, les agradecemos por permitirnos acompañarlos en su importante labor.

En la búsqueda de procesos de defensa del agua nos encontramos con el trabajo de la ADC (Asociación para el desarrollo campesino) quienes nos invitaron a conocer dos de las 52 reservas que se han conformado a lo largo del tiempo en la búsqueda de la conservación, el fortalecimiento y el autoabastecimiento de la Cocha. En la reserva “Las Perlas” iniciamos el recorrido con un alucinante camino de flores, doña Martha, don Guillermo y su hijo Levis nos recibieron con un exquisito desayuno de trucha ahumada, el abrebocas de lo que querían compartir, una propuesta cíclica donde los cultivos limpios, la producción de gas metano a partir del excremento de los cerdos, el reciclar y limpiar el agua para el riego de los cultivos y las cercas vivas entre otras, muestran que con trabajo y perseverancia es posible encontrar calidad de vida en conjunción con la naturaleza.

En la reserva “El Encanto Andino” ubicada al borde de la laguna, se encuentra a doña Conchita que bajo el pensamiento de la conservación hace de su hogar un espacio natural donde llegan seres que como nosotros buscamos propuestas que se dirigen a repensar la vida.

En la Cocha, los campesinos inician su jornada a las 4:00 a.m. y son acompañados hasta las 7:00 a.m. con el programa radial que Edgar diariamente emite desde la emisora comunitaria “Las Brisas de la Cocha” ubicada en el centro urbano, esta propuesta de comunicación trabaja temas ambientales y sociales que repercuten directamente en la comunidad. Gracias a Ricardo por sus palabras, su compañía y guía, a Doña Martha, Don Guillermo y a Levis por el recibimiento y por hacer de su espacio un ejemplo de resistencia y existencia, a doña Concha por su acogida y a Edgar por abrirnos las puertas de la emisora.

Durante nuestra estadía en San Juan de Pasto, se realizó el cabildo abierto y permanente de la Marcha Patriótica, arribaron a la ciudad diferentes comunidades del departamento de Nariño para discutir y generar propuestas que posibiliten cambios políticos y sociales en el país. Esta jornada culminó con el 1 de mayo, día histórico donde salieron a manifestar los diferentes sectores sociales del departamento alzando su voz por el trabajo que dignifica la vida humana, mostrando su inconformidad frente al Plan Nacional de Desarrollo y las políticas nacionales que avanzan en el país.

Ni Poquitos, Ni Chuchingas

Por todo nuestro vivir y andar en la ciudad sorpresa, sentimos el deseo de un pronto retorno, por ahora, nos despedimos del Pasto bohemio, coqueto, alegre, trabajador, amable y luchador.

A su gente…..¡Que Dios le Pague!

La marcha del Macizo

Minotore

La poésie cést un sujet del’absurde
La main touffue qui le manque au manchot
Le territoire endormi d’ une vierge nue
La cicatrice ouverte dans l’oiseau des déserts
La soif que clame dans l’ imsomnie
La poésie cést le phallus absent d’ un ange
Les ombres cyclopes qui boivent du vin de la mort
Dans le crâne pendu de la lune
La poésie est un chien affamé
Au dedans desséché de la salive.

Minotauro

La poesía es un asunto del absurdo
La mano frondosa que le falta al manco
El territorio dormido de una virgen desnuda
La cicatriz abierta en el ave de los desiertos
La sed que clama en el insomnio
La poesía es el falo ausente de un ángel
Las sombras ciclopes que beben el vino de la muerte
En el cráneo ahorcado de la luna
La poesía es un perro hambriento
En el interior reseco de la saliva.

Poema: Luis Armando Botina Castro, del libro Inédito; Casa de Citas
Traducción al francés, Venus Alexandra Molina Martínez
Licenciad en inglés y francés, Universidad de Nariño.